La Policía Nacional ha detenido en la localidad de Benidorm a un varón, de 43 años de edad, por un delito contra la propiedad industrial e intelectual. El detenido era el responsable de un establecimiento comercial que vendía productos falsificados de diferentes marcas.
La investigación se inició tras la denuncia de una sociedad dedicada a la protección de marcas originales, que representa a diversas firmas de reconocimiento nacional e internacional. Esta entidad alertó a la Policía Nacional sobre la comercialización de artículos que imitaban de forma no autorizada sus marcas en un establecimiento comercial de Benidorm.
Ante estos hechos, se organizó un operativo policial específico con el objetivo de verificar la denuncia y, en su caso, perseguir el delito. Para llevar a cabo la inspección en el local señalado y la intervención de los productos presuntamente fraudulentos, se contó con la colaboración de un perito judicial experto en marcas.
Una vez en el establecimiento investigado, los agentes confirmaron las irregularidades denunciadas. Pudieron constatar que en el local se exhibían y comercializaban numerosos productos de marroquinería y textil que imitaban marcas registradas de reconocido prestigio, con claros indicios de falsificación.
Tras finalizar la inspección, los investigadores realizaron un recuento de los artículos fraudulentos, contabilizando un total de 1.111 artículos de imitación, las cuales fueron intervenidos en su totalidad. En el transcurso de esta operación, se procedió a la detención del responsable del establecimiento, a quien se le imputaron delitos contra la propiedad industrial e intelectual.
Una vez practicadas todas las diligencias policiales, todo lo actuado fue remitido al Juzgado de Instrucción de guardia de la localidad de Benidorm.
Delito Contra la Propiedad Industrial e Intelectual
El delito contra la propiedad industrial e intelectual se refiere a la infracción de los derechos que protegen las creaciones y distintivos relacionados con la actividad comercial, como marcas, patentes, diseños industriales, y obras artísticas o literarias. La venta o distribución de productos falsificados no solo genera pérdidas económicas significativas para las empresas legítimas, sino que también puede representar un riesgo para la salud y seguridad de los consumidores, dado que estos productos no suelen cumplir con los estándares de calidad y seguridad exigidos.
La Policía Nacional recuerda la importancia de adquirir productos en canales de venta autorizados para garantizar la originalidad y la seguridad de los mismos. Cualquier ciudadano que sospeche o tenga conocimiento de la venta de productos falsificados puede y debe denunciarlo ante las autoridades competentes, contribuyendo así a la lucha contra esta actividad ilícita.